Una instalación eléctrica es el sistema de circuitos y componentes que permiten la distribución y uso de energía eléctrica en edificios, viviendas, industrias, etc. Incluye elementos como cables, interruptores, tomacorrientes, tableros, y dispositivos de seguridad para garantizar un funcionamiento seguro y eficiente.
Conductores: Cables y hilos que transportan la corriente eléctrica. Interruptores y fusibles: Controlan el flujo de corriente y protegen contra sobrecargas y cortocircuitos. Tomacorrientes y enchufes: Permiten la conexión de aparatos eléctricos. Tableros de distribución: Distribuyen la energía eléctrica a los diferentes circuitos. Dispositivos de seguridad: Dispositivos que detectan y cortan la corriente en caso de problemas, como interruptores diferenciales y magnetotérmicos. Medidores: Registran el consumo de energía eléctrica. Acometida: El punto de conexión de la instalación eléctrica con la red de suministro.